Cada
dia me acerca más a la noción clara de que el trabajo interior que realizo tiene
como fin mi misma y que nadie puede vivenciarlo en mi manera de hacerlo, de
sentirlo, de entenderlo. Cada dia me doy cuenta que cada uno tiene su sentido y
razón para vivir y dejarse vivir.
Sentir es tan
particular a cada cual! Sentir es percibirse ser, percibirse estar…Dos niveles
de conciencia, el segundo le enseña al primero y viceversa…Cómo soy? Cómo
estoy? Son dos niveles de mirarse y en el segundo te reflejas de manera
que te mires y te conectes a tu esencia, con tu ser.
Como ser en
este mundo somos resultado del karma pero en esencia, como ser de otro mundo,
no somos eso.
Tal vez la reencarnación
sea un invento humano y no divino, tal vez sirva para entender que tenemos una
historia en esta tercera dimensión pero este no es nuestro origen: es nuestra
escuela.
Si reencarnar
es el orden de lo divino en este plano de conciencia, sirve para darnos cuenta:
quiénes hemos sido y porqué. “Hemos Sido” en el sentido de estar, de pasar de
un estado a otro, físico y anímico. como cuando nos entristecemos o nos reímos.
Conocernos en esos estados para diferenciar lo irreal de lo real. La apariencia
versus la esencia. Eso significa des-identificarnos.
En el camino
interior vamos quitando capas que nos esconden de la verdadera naturaleza de
quienes somos.
La primera, ana
maya kosha es el vehículo físico a través del cual se manifiestan todos los
demás.
La más dificil
y en la que podemos centrar nuestra experiencia de estar en este mundo bajo las
coordenadas de espacio tiempo en que nos movemos, es mana maya kosha, la capa
de la mente egoica, la que está determinada por esas coordenadas espacio
temporales y donde se cultiva la auto imagen, el ego que para reafirmarse niega
la diferencia. La imagen que tenemos de nosotros mismos está basada en nuestras
creencias y experiencias y proyectamos esa imagen a los otros de tal forma que
nos comprometemos con ella hasta el punto de defender ideas y justificar
nuestras acciones negándonos a otras opciones o puntos de vista.
Una capa más, vijnana
maya kosha o cuerpo búdico en otros vocabularios metafísicos es la que nos
permite darnos cuenta y discernir la realidad que vivimos, es la que se
pregunta y se refleja alcanzando asi un poco más de noción de que somos algo más
que esa realidad externa que nos determina con nombre y apellido, con nacionalidad,
raza y religión.
Ananda maya
kosha o cuerpo causal es la primera manifestación de nuestra individualidad
donde el ego está ensimismado, latente, allí se experimenta la conexión a
nuestra esencia, el primer estado manifestado de nuestro origen como espiritu,
el atman, una envoltura luminosa donde se disfruta verdadera paz y armonía. Se
llama cuerpo causal debido a que allí está la esencia de lo que somos en
espíritu y en las huellas que traemos de vidas pasadas grabadas en el
inconsciente. En la relajación, en el estado del sueño, en la meditacion y en
la oración buscamos acceder a ese cuerpo de luz.
Prana maya
kosha, el cuerpo de energía, se manifiesta gracias al cuerpo físico por medio
de sensaciones, señales intuitivas que nos posibilitan la experiencia de
escucharnos a través del sentir. La respiración es la energía más sutil de
todas las que vivenciamos en el cuerpo físico y nos permite hacer el puente
entre éste y las otras capas más sutiles. Pero solo haciéndola a conciencia
podemos liberar el prana de la mente egoica para acceder a nuestra verdadera
naturaleza.
Entender esto
nos pone a vibrar en conciencia de unidad. Nuestra visión de la polaridad es
concepción de dos en unidad y en equilibrio. El Tao de Lao. Esta es la llamada
conciencia crística porque solo se puede lograr con la fuerza del amor. La que
cohesiona el todo. El cuarto chakra, el centro de nuestra estructura
energética, la plataforma del corazón.
Sentir y hacer conciencia de ese sentir es
la forma de vivenciar las incoherencias. De que salga la luz en medio de la
oscuridad y encuentres el verdadero color de las cosas. Hay colores para todos
y cada uno. Esa es la individualidad que se construye hoy en todo el planeta ya
que estamos en el grado más alto de diversidad pero la conciencia de esto
debería y tiene que llevarnos a un mundo de respeto a la diferencia del otro.
Esto se logrará en el tiempo, porque depende de cada cual: cada ser-persona
necesita re-conocerse; re descubrirse; reciclarse; rescatarse. Y no puede
esperar a que el otro-llámese médico, cura, maestro, gobierno o estado- lo haga
por él porque eso nunca ocurrirá mientras el otro no acepte tu diferencia pues
aún no ha reconocido la suya.
Cuando te encuentras con seres que se
aceptan y aprenden de sí mismos entonces la relación es de ser a ser, de igual
a igual…In Lakesh…Es la hermandad que trascendería la lección de estar aquí.
Algo que solo se consigue cuando
“practicas tu yoga”: mirando hacia dentro con el tercer ojo que es la visión de
la unidad de la polaridad; trabajo interior con el observador que es la
capacidad de reconocerte: para vivenciar tu verdad que es la conciencia sin
tiempo del ser que somos.
Las herramientas para ello las tenemos
encima: el cuerpo de energía del que estamos hechos. Laboratorio del alma. El
mundo externo es su extensión, su tierra, para ser cuidada nos la dio el
creador. Cuidándola aprendemos de ella. Algo que se hace al ritmo de conciencia
de cada ser.
Asi enfocados, la guerra no existe. El
conflicto no tiene motivación de extenderse a los otros. Pues el conflicto
siempre estará en este mundo mientras exista la mente egoica. Y ésta solo se
trasciende en la aceptación del otro tal como es y de mi tal como soy…Es un
proceso donde se hacen elecciones cada vez más basadas en la conciencia y en la
confianza de que atraemos lo que necesitamos para vivir. Cuando aceptas, te
amas y cuando aceptas al otro, lo estás reconociendo hecho de la misma esencia.
Solo puedes sentir amor. Y la compasión es lo que le sigue. Lo que nos reúne.
Amor y compasión por ti, por el otro, por todo.
Este es el ejercicio para ser tu propio
maestro que es lo que vienes a hacer a este plano. Volver a tu esencia divina
es diluirte en la unidad de la conciencia que sostiene todo. Vivenciar tu
verdadera naturaleza te da fortaleza, te nutre, te sana, te reconcilia con el
sentido de vivir! Eres energía de la que está hecho todo lo que existe! Eres
uno con todo! Eres la ola pero a la vez, eres el mar!
Esto es algo que la Humanidad por partes o
por épocas tiende a olvidar!